El vicepresidente del Consell Insular de Mallorca, Antoni Pascual, admitió ayer que la institución «hubiese embargado las cuentas del Ajuntament de Calvià» por no cumplir con su compromiso de pagar una deuda de 549 millones contraída con la institución insular. No obstante, Pascual precisó que «embargar cuentas corrientes entre instituciones es imposible» ante la sorpresa de los dirigentes del grupo socialista del Consell que estaban presentes en el pleno.
El gobierno del Consell Insular de Mallorca lamentó que el Ajuntament no haya cumplido su compromiso de pagar la deuda durante cinco años. «La deuda de Calvià se negoció a finales de 1997, pero ha sido incumplido por parte del ayuntamiento», cuestionó Pascual.
La consellera del PP María Salom preguntó a Pascual si la intención del Consell era reducir la deuda a través de la concesión de subvenciones. Pascual replicó que todos los ayuntamientos tienen «todo el derecho del mundo a presentar propuestas para cobrar subvenciones», y que en el caso de Calvià este dinero que debería cobrar se le restará de la deuda que tiene el municipio con el Consell. «El PP quiere saber si dar subvenciones a Calvià para reducir la deuda será la política que se seguirá a partir de ahora en el Consell», cuestionó María Salom.
Otros ayuntamientos de Mallorca también tienen deudas con el Consell, aunque ninguno de ellos supera la cuantía de Calvià. Felanitx adeuda 10'7 millones y Marratxí 5'1 millones. Sant Llorenç tiene una deuda con el Consell de 11'2 millones, entre otros municipios.