El Govern balear se implicará plenamente en la gestión y financiación de un centro de acogida en Inca que se pondrá en marcha este año. Así se lo manifestó ayer la consellera de Benestar Social, Fernanda Caro, a la regidora municipal de Serveis Socials durante el encuentro que mantuvieron junto con el director general de Serveis Socials, Antoni Sancho.
Ajuntament y Govern optarán en principio por utilizar como centro de acogida las instalaciones que hay delante del comedor social, tal y como se prevé en un proyecto presentado por Cáritas al Ajuntament. Esta propuesta, que contempla la construcción de un centro con 16 plazas, es la más viable según los políticos ya que existe una infraestructura adecuada y solo habría que aportar el personal necesario. Será imprescindible dotar al centro con un trabajador social y algunos monitores.
El funcionamiento de la casa de acogida que abriría sus puertas por las tardes costará aproximadamente 18 millones de pesetas anuales, cifra que Ajuntament y Govern están dispuestos a asumir aunque contempaln la posibilidad de que el Consell Insular también tome parte. En cualquier caso, la consellera Fernanda Caro ha manifestado que a medio término se ha de proyectar la construcción de un centro de acogida más completo que cuente con servicios diversificados y con un espacio específico para las mujeres maltratadas.
La consellera Caro ha reconocido la existencia de crecientes e importantes problemas de marginación social y de gente sin hogar en la Part Forana, especialmente en Inca y Manacor. Precisamente, el Govern pretende que el centro que se construirá en Inca sirva de muestra para abrir en un futuro otro centro de acogida en Manacor donde ya existe un albergue de iniciativa privada.