Margarita Mulet quiere dejar constancia de que «el contencioso no es con el Ajuntamiento, sino única y exclusivamente con su alcalde Miquel Mateu Roig, ya que todas las actuaciones contra mi persona han sido por Decreto por Alcaldía, incluso la personación en autos, no consiguiendo nunca que el Ayuntamiento lo refrendara». A su juicio, «la sentencia conseguida por Mateu, no contiene ningún fundamento jurídico, se basa única y exclusivamente en declaraciones de falsos testigos y hechos no probados». «El motivo de la demanda presentada por Mateu contra mi persona era única y exclusivamente para impedir mi reingreso en el servicio activo de la Corporación», dice.
Asegura que «el único empleado que dijo en su testifical que yo le había ordenado que me pasara las famosas llamadas a mi despacho es Miguel Ballester Ferrer, ex cuñado mio, el cual es público y notorio que ha mantenido en numerosas ocasiones enfrentamientos conmigo por asuntos personales dentro de la propia sede del ayuntamiento, y el cual, en su testifical ante la Conselleria de Función Pública, admitió tener animadversión contra mi persona, por lo que su testimonio no puede tenerse en cuenta». Margarita Mulet añade que «en cuanto a las llamadas que afectan al Ayuntamiento de Bunyola, ni siquiera el Tribunal se ha molestado en comprobar las horas de las mismas, porque de haberlo hecho se habría dado cuenta que es imposible lo que dicen los testigos presentados, ya que éstos no se encontraban, según las horas del Registro del personal, en esos momentos en su lugar de trabajo». Además, expone que «los empleados del Ayuntamiento de Bunyola no pueden ser testigos de los sucedido en la Entidad Local Menor (ELM), por no ser personal de ésta y cuyas oficinas distan más de 4 kilómetros y con horario de oficina distinto al del Ayuntamiento de Bunyola». También critica que no se tomó declaración a la Entidad Local Menor. «Sólo se citó a una empleada de la ELM de Palmanyola, la cual manifestó no tener ningún conocimiento sobre los hechos enjuiciados». Además, «existe un expediente con el horario laboral y que era imposible acceder en distintas horas».