Los ayuntamientos de Mallorca no podrán cambiar el destino de las ayudas del Pla Mirall a otros proyectos, aunque los consideren más prioritarios. Fuentes de la Conselleria d'Obres Públiques han matizado a este diario que «el presupuesto ya está aprobado para una finalidad determinada y legalmente no se modificar».
La iniciativa de destinar las subvenciones del Pla Mirall a otros proyectos diferentes a los aprobados inicialmente la planteó por primera vez el alcalde de Algaida, Jaume Jaume, al presidente del Govern, Francesc Antich, el pasado mes de septiembre. Antich anunció que el Govern destinaría aportaciones de las ayudas del Pla Mirall para arreglar los problemas del suministro de agua potable.
Finalmente, los técnicos han determinado que este intercambio no se puede hacer. «Son proyectos finalistas que los ayuntamientos aprobaron en sesión plenaria», indicaron fuentes de Obres Públiques, departamento que gestiona una parte de los proyectos del Pla Mirall.
Como mucho, el Govern ha aprobado la prórroga de la ejecución de los proyectos hasta octubre del año 2000. De casi mil obras aprobadas en todos los municipios de Mallorca, el retraso afecta a unos 50 ó 60 proyectos.
Casi todos los municipios están desarrollando las obras, salvo Porreres que alegó no disponer de terrenos para el proyecto solicitado y Sineu que ha renunciado a una obra.
De momento, tampoco se hará realidad el proyecto inicial del Govern de unificar el Pla Mirall con el Pla d'Obres i Serveis del Consell de Mallorca. Antoni Alorda, presidente de la Comissió de Cooperació Municipal del CIM, ya propuso recientemente que las cantidades de los proyectos del Pla Mirall sin adjudicar se transfirieran al Consell. La respuesta ha sido «no». La Conselleria d'Obres Públiques seguirá gestionando las obras de este plan promovido por el anterior Ejecutivo conservador.