Después de haber agotado todas las vías posibles, entre ellas numerosas llamadas de teléfono e inútiles diálogos con el Ajuntament d'Inca, a la vecina de Lubí Martina Capó no le ha quedado otra alternativa que denunciar y pedir responsabilidades a este ayuntamiento por los graves daños y perjuicios que ha ocasionado a sus propiedades la estación depuradora de la ciudad.
Según Capó, «cada vez que llueve, las aguas residuales que provienen de la estación depuradora de Inca inundan y causan perjuicios en mi finca. La semana pasada llovió de nuevo y hasta hace dos días el agua ha pasado por nuestros terrenos». La denunciante también ha expuesto que «nos han desgraciado la finca ya que durante cuatro años no hemos tenido producción de naranjas. Además, no podemos beber agua del pozo porque unos análisis que hicimos así nos lo indicaron. Luego nos dicen que es por culpa de los abonos cuando aquí no los hemos utilizado nunca». Ante los hechos expuestos, Nieves Linares, abogada de Martina Capó, ha decidido presentar un recurso contencioso ante el Tribunal de Justicia de las Illes Balears, que ha sido admitido a trámite.