El Ajuntament d'Inca cobrará a partir del próximo año el servicio de enterramiento ya que resultaba «deficitario», según explicó el concejal de Hacienda, Mateu Dupuy. Según el edil, el servicio genera un déficit de 18 millones de pesetas anuales. Otro de los motivos por los que se cobrará el citado servicio es la inminente apertura del tanatorio municipal y desde el Ajuntament se considera que la nueva instalación representará un gasto añadido, por lo que ya se han fijado unas tarifas aplicables en cuanto el velatorio esté finalizado.
En realidad no se crea una nueva tasa, se recuperan figuras impositivas que estaban vigentes en el año 1991 y, de todas formas, los residentes empadronados en Inca tendrán una bonificación del 95 por ciento en algunos de los servicios del cementerio. De este modo, para enterramientos de cadáveres se abonarán 3.000 pesetas. Para enterrar fetos, miembros o cenizas se pagarán 1.500 pesetas. Los precios citados son reales, sin bonificación. Sin embargo, otros servicios como exhumación de cadáveres no tienen bonificación.
Con respecto a la revisión y actualización de otros impuestos y tasas, en la mayoría de casos no se incrementan. Sufrirán aumento el impuesto de vehículos pero proporcional a la cilindrada. Es decir, a mayor cilindrada, mayor impuesto. También aumenta en un 5 por ciento el servicio de la grúa municipal.