La empresa Cape Balear que realiza los trayectos de Cala Rajada (Capdepera) a Ciutadella (Menorca) ha tenido que suspender, durante este largo fin de semana de Todos los Santos, un total de doce viajes. El apoderado de la empresa, Pere Bonnín, ha explicado las causas de la suspensión de los doce viajes: «La Capitanía Marítima de Balears tenía que informar a las autoridades francesas de la inspección que se había realizado al catamarán Locmaria para que ésta diera la autorización pertinente para poder llevar a cabo los viajes».
Según un comunicado emitido por la propia empresa Cape Balear, «el barco 'Menorca Express' sufrió una avería en uno de sus motores principales, por ello, comunicamos con tiempo suficiente a las autoridades y organismos competentes que cubriríamos los servicios de este fin de semana con el nuevo barco, Locmaria». Los problemas han surgido cuando la Capitanía Marítima de Balears, en Palma, no ha informado a las autoridades francesas de la inspección que se llevó a cabo el viernes pasado, día 29 de octubre, en el puerto de Palma.
El apoderado de la empresa, Pere Bonnin, acusa a las autoridades de la Capitanía Marítima de Balears de la situación que padece Cape Balear: «Es una irresponsabilidad de la Capitanía Marítima de Balears por no haber realizado la pertinente tramitación. Unas 700 personas se han quedado sin poder utilizar nuestros servicios».