Campanet recuperará dos antiguos mapas que describen fielmente cómo era el término municipal a mediados del siglo XIX. Concretamente, uno de los mapas lleva la firma de Pedro Moreno Ramírez y está datado del año 1859. El otro fue cartografiado por Joan Rossiñol y es algo posterior, de 1860. Ambos están alzados a una escala de 1:10.000 y sobresalen de Campanet un pequeño núcleo de población y las distintas alquerías, possessions y fincas que posteriormente se han integrado en el tejido urbano de la villa, aunque los nombres perduran dividiendo el pueblo en barriadas.
Obviamente, no todas las grandes extensiones de terreno se corresponden ahora con la zona urbana, quedan fincas grandes como Gabellí Petit y Gabellí Gran, que a pesar de que han sido segregadas continúan estando en la zona rural.
Una de las peculiaridades más llamativas de los planos son la ortografía de algunas possessions. Un buen ejemplo son las fincas denominada Bonnava, ahora Monnàber, o Alfangar, ahora Fangar. También la colina conocida actualmente como Alborallet, antes se denominaba Augollaret. Es curioso comprobar como en el siglo XIX el término municipal de Campanet atravesaba la actual carretera de Alcúdia y penetraba en lo que ahora es Búger. Al otro lado de la vía se encontraban fincas como Can Capellí y Matas Grosas.
Magdalena Solivellas, concejal del Ajuntament de Campanet, explicó que los mapas tienen un valor simbólico puesto que representan gráficamente la distribución de terrenos y parcelas del siglo XIX, lo cual forma parte de la historia del pueblo. La edil añadió que para restaurar los antiguos documentos la Comissió de Cultura del Consell de Mallorca ha dado una subvención de 400.000 pesetas. El coste total de la restauración asciende a 600.000 pesetas.