Más de 250 miembros de la asociación Amics del Far se manifestaron ayer al mediodía para protestar contra las obras de ampliación de la piscifactoría del Port. Los manifestantes piden que se cumpla la promesa de la alcaldesa y del anterior Govern, que se comprometieron a desmantelar esta estación al cabo de ocho años.
Los vecinos han recogido más de 500 firmas y han remitido una carta a la alcaldesa de Andratx, Margalida Moner, recordándole esta promesa. También se han dirigido a al conseller de Agricultura i Pesca para pedir el traslado de las instalaciones o su adecentamiento. «Las aguas de esta zona están siempre sucias y desprenden malos olores», indicaron los manifestantes. «Cuando hay corriente, la suciedad llega hasta el faro».
Josep Bestard y Alberto Andónegui, de UM, afirmaron que si la piscifactoría crea problemas a los vecinos (ruidos, suciedad...), el Govern debe solucionarlos.
El pasado miércoles, la intervención de un grupo de vecinos provocó la paralización de unas obras en la estación de acuicultura del Port. El primer teniente de alcalde de Andratx, Eugenio Hidalgo, envió al lugar al jefe del área de Urbanismo para abrir un expediente por una presunta infracción urbanística, ya que se pretendían iniciar las obras en la estación sin la pertinente licencia municipal.
No quieren más cemento en el Port
Los manifestantes se concentraron durante una hora aproximadamente
en el faro grande del Port, donde esta ubicada la piscifactoría.
Entre las pancartas que portaban se podía leer «Prou de ciment» o
«Prohibida la entrada a peces gordos». Los Amics del Far indicaron
que continuarán las movilizaciones si el Govern no toma medidas en
torno a este tema. De hecho, gracias a ellos se han paralizado las
obras que iban a comenzar en la piscifactoría.