La instalación del radar meteorológico en la zona Militar de Cap Blanc en Llucmajor, sólo está pendiente de que el Ministerio de Defensa de el permiso para colocarlo en las instalaciones militares. Según todos los indicios no habrá problemas para el si de Defensa y en pocos meses el radar podría estar en funcionamiento.
Los técnicos del Instituto Nacional de Meteorología inspeccionaron la zona militar hace varios meses y se decidieron por estos terrenos que son del Estado. De esta forma se acaba con los problemas de propiedades y polémicas sobre su posible impacto. Se hablado de instalarlo en las montañas de Artà, Pollença y también en el Puig de Randa de Algaida. Estas tres ubicaciones fueron rechazadas por vecinos y Ajuntaments por su fuerte impacto.
Agustí Jansar, director del Centro Meteorológico de Baleares, explicó que el Cap Blanc es uno de los puntos más viables para instalar este moderno radar que va equipado con tecnología punta. Si bien Jansà apuntó en su día que «puede que es Cap Blanc no sea la más idónea, si la más factible». Esta puntualización viene a consecuencia que una pequeña zona del Pla de Mallorca puede quedar sin cobertura si el radar está en el Cap Blanc. Pero el aparato de alta tecnología tendrá un radio de cobertura de 240 kilómetros donde controlará todas las Islas Baleares. La función del radar consistirá básicamente en realizar análisis sobre la atmósfera que permita la predicción con seis horas de antelación y una fiabilidad de casi el cien por cien de fenómenos atmosféricos adversos en cualquier punto de Baleares.
Su instalación se considera prioritaria por parte del Centro Meteorológico de Baleares. Desde principios de los años 80 se trabaja en encontrar una ubicación para el radar. Ahora parece que la de Cap Blanc será la definitiva y no contará con el rechazo de vecinos y propietarios al ser una zona de propiedad estatal.