FOTO: TOMEU GARCIES
Una donación de un canónigo de la Seu, mediante una manda pía,
permitirá hacer realidad una de las fases del proyecto original de
construcción de la parroquia de Sineu, que no se llevó a cabo
cuando se levantó el templo.
Un total de diez vitrales serán colocados en la iglesia. Para ello, los operarios ya están destapando los laterales del templo parroquial. Con esta obra, el interior del edificio ganará en luminosidad, característica de las iglesias de estilo gótico.
Los vitrales que se van a instalar en la iglesia van a ser de un
color fuerte y contendrán escenas de la Mare de Déu.
Las medidas de los vitrales son diez metros de alto por uno y medio
de ancho, y su autor es el artista Cánaves, el mismo que realizó
los que adornan la Seu de Palma.
Los vitrales formaban parte del proyecto de construcción de la iglesia, que data del siglo XVI, pero no se pudieron llevar a cabo, seguramente por una falta de capacidad económica. Entonces, se decidió tapiar los laterales, que se han comenzado a abrir esta semana.