Las obras de reforma del colegio Jaume III de Llucmajor, conocido también como ses Escolas, están paralizadas desde el día siguiente a las elecciones, el pasado 13 de junio. Desde esta fecha, ningún obrero contratado por el Govern ha entrado en el centro docente.
La Asociación de Padres y Madres de Alumnos (AMPA) del centro, que preside Jerònima Calafat, ha mostrado su preocupación por el hecho de que será imposible que en septiembre las obras puedan estar concluidas para iniciar el nuevo curso y, especialmente, las 4 aulas que fueron desalojadas a finales del pasado año ante el peligro de desplome del techo y paredes.
Según explican desde el colectivo de padres, el principal problema que ha motivado la paralización de las obras parece ser que es porque falta aprobar el proyecto de rehabilitación de estas cuatro aulas.
Tanto el grupo municipal del PSM de Llucmajor, como la misma AMPA, han constatado que tres semanas antes de las elecciones municipales y autonómicas había en ses Escoles un grupo de obreros que trabajaba a un fuerte ritmo en las 4 aulas que tuvieron que ser desalojadas por su mal estado. Este aspecto les hizo concebir esperanzas de que el problema del centro quedaría resuelto. Pero su sorpresa fue mayúscula cuando comprobaron que el día siguiente de las elecciones, no entró ningún obrero en el centro.
El Ajuntament de Llucmajor ha negado que este hecho tenga algo que ver con el resultado de las elecciones. La falta de aprobación del proyecto de las cuatro aulas ha imposibilitado que los obreros no puedan seguir con su tarea.