El exceso de producción de patatas, que han generado tanto los productores nacionales como los europeos, ha hecho bajar los precios hasta 15 pesetas por kilogramo.
Este es el precio que cobran, en estos momentos, los payeses de
sa Pobla, si consiguen colocar la producción que han ido
almacenando.
Desde el año 1992, en que se llegó a pagar sólo una peseta por
kilogramo, no se había producido una bajada tan espectacular en el
precio de la patata, aunque, en estos años, ha habido campañas
mejores que otras. Los tres últimos años fueron los mejores y a
finales de junio, que es cuando la demanda es más lenta, el pasado
año el agricultor cobraba 30 pesetas por kilogramo, justo el doble
de lo que está cobrando en estos momentos.
Los profesionales del sector han calificado la campaña de irregular aunque hasta mediados de mayo fue una campaña normal. A partir de mayo los precios iniciaron la bajada pasando en poco tiempo de 125 a 25 pesetas por kilogramo.
Con el actual precio la situación es muy dificultosa ya que los agricultores pierden dinero.