El paseo marítimo del Port d'Alcúdia se inauguró ayer acompañado de una protesta silenciosa protagonizada por parte de algunos comerciantes que quisieron manifestar con pancartas su desacuerdo con el proyecto y con el retraso de las obras.
El acto estuvo presidido por el presidente del Govern balear, Jaume Matas, acompañado del alcalde de Alcúdia y conseller de Medi Ambient, Miquel Ramis, y de una comitiva oficial, de la cual no formaron parte ni el regidor de UM ni los concejales del PSOE. Los invitados recorrieron todo el espacio rehabilitado. El proyecto de 410 millones de pesetas estaba incluido en el Pla Mirall.
La gran ostentación de palmeras, madera y farolas centran este proyecto que tiene como objetivo crear un centro comercial y cívico en el mismo casco urbano del Port. Ante las distintas pancartas que rezaban lemas como «No tenim escoles, però sobren faroles» o «Pedimos jardines, pusieron adoquines», Jaume Matas manifestó que «la ejecución del proyecto ha sido una decisión política, no deben olvidar que también ha sido el alcalde el que ha conseguido dinero para el centro de salud y para el auditoro».
Respecto a la construcción de nuevos centros escolares, Matas indicó que «sólo hace trece meses que tenemos las competencias frente a los 13 años que estuvieron en manos del PSOE; las escuelas también se harán pero sin dejar de hacer lo necesario».