La primera Feria de Abril que se celebra en Inca con la
colaboración del Ajuntament fue inaugurada ayer envuelta de
polémica.
Varios miembros de la agrupación socialista de Inca, encabezados
por Francina Armengol, repartieron durante el acto de inauguración
unas octavillas en las que denunciaban que el alcalde Pere Rotger
(PP) había prohibido la participación del PSOE en la feria, negando
a esta agrupación la instalación de una caseta en el recinto
ubicado en la Plaça del Bestiar.
Las octavillas socialistas contenían frases como éstas: «¿Sabe usted que el alcalde ha prohibido la participación del PSOE en esta feria?», «¿Será una demostración más de su escaso talante democrático?», «O será que teme la capacidad de convocatoria del PSOE?», «¿Es así, prohibiendo la participación de los inquenses como en tiempos de la dictadura que piensa ganar las próximas elecciones del 13 de junio?», «La participación de partidos políticos, sindicatos y todo tipo de organizaciones democráticas es esencial, incluso en actos como esta Feria de Abril».
La agrupación socialista había solicitado al alcalde Rotger la instalación de una caseta, pero éste respondió que no «con la finalidad de que sea realmente una fiesta participativa, de forma que todo el mundo pueda entrar y salir de las diferentes instalaciones sin que nadie se pueda sentir cohibido o en compromiso».