Un estudio realizado desde el departamento de Psicología de la Universitat de les Illes Balears (UIB) ha detectado que el colectivo de la Policía Local de Calvià tiene «un alto riesgo de padecer el burnout o síndrome de estar quemado». El informe, encargado en su día por el Ajuntament de Calvià, ha sido firmado por Alfonso Palmer y F. Javier Pérez y evalúa el clima laboral del cuerpo de seguridad municipal, así como los factores personales y ambientales que pueden incidir en el rendimiento de los trabajadores.
El estudio realizado por un equipo de investigación ha detectado entre el colectivo una serie de déficits y problemas tales como carencias de las actuales instalaciones, una cierta descoordinación de áreas y servicios, una falta de definición en los objetivos, falta de motivación y de implicación en las tareas, falta de incentivos, pérdida de confianza en los mandos y, como consecuencia de todo lo anterior, «una percepción de deterioro de la imagen interna y externa del cuerpo».
Los autores del informe, sin embargo, lamentan una «cierta decepción» respecto a los datos obtenidos porque a su entender ha habido una falsación, «resultado de la emisión de algún tipo de consigna o instrucción entre el propio colectivo de policías buscando el enmascaramiento deliberado de los datos».
En sus conclusiones, el informe cita «la existencia de profundos problemas en el colectivo» y propone «una reevaluación» del clima laboral y diseñar un programa que permita optimizar «los aspectos positivos que presenta el colectivo».