El Grup Balear d'Ornitologia i Defensa de la Naturalesa (GOB) ha presentado una nueva andanada de alegaciones a la revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Calvià y entre ellas destaca una firme petición de revisar de nuevo «a la baja» el suelo urbano del municipio y no permitir ninguna nueva construcción en la franja litoral.
Las alegaciones del GOB se han centrado básicamente en cinco aspectos del planeamiento urbanístico calvianer: prohibir nuevos edificios en la costa, reducir la capacidad del suelo urbano, incrementar la protección del suelo rústico, impedir más instalaciones turísticas y diseñar una red viaria más humanizada.
Los ecologistas proponen que «la primera línea del litoral aún no urbanizada debe ser preservada» como una zona verde. Además, esta premisa debe complementarse con la reducción de la capacidad constructora que actual permite el suelo urbano de Portals Vells, Sol de Mallorca, Puig de sa Sirvi (s'Ensaïmada), el Toro, Cala Fornells y Costa d'en Blanes e incrementar la protección de las áreas no degradadas del interior prohibiendo nuevas parcelaciones y campos de golf. También sugieren crear más zonas de reserva marina e incrementar el área de Cala Figuera. En cuanto a equipamientos turísticos, el GOB considera que Calvià «tiene una saturación turística» y no tiene razón crear nuevas plazas.