La propuesta del Consistorio solleric consiste en solicitar al Govern balear que las barreras de protección de la carretera Palma-Port de Sóller, en el tramo comprendido entre el túnel y Sóller, sean de piedra, como estaban antes de la reforma de la calzada, y no de metal, como las que han sido instaladas en las últimas semanas. El pleno también pide que se respeten los accesos a las fincas colindantes.
El alcalde, Joan Arbona (PSM), dijo que «las vallas metálicas deterioran el paisaje» y manifestó que son muchos los conductores que ya se han quejado por esta circunstancia. El concejal nacionalista Miquel Gual agregó que la propuesta que se eleva a Foment tiene como objetivo impedir que se produzca «una chapuza» como la realizada en la boca norte del túnel.
El portavoz del PP e ingeniero de carreteras, Bartomeu Darder, dijo que el proyecto inicial preveía cubrir un tramo del torrente pero que esta opción se ha descartado porque era muy impactante pero coincidió en que es necesario retirar las vallas metálicas y sustituirlas por barreras de piedra o madera. Darder indicó que el Consell está haciendo lo mismo que el Govern en otras carreteras de la Serra.
El pleno pide mantener el peaje
bonificado
El pleno, también por unanimidad, aprobó otra propuesta
institucional sobre el mantenimiento de la tarifa especial para
todos los residentes en Sóller y Fornalutx que utilizan el túnel de
peaje. El batle dijo no poder estar de acuerdo con el hecho de que
la compañía concesionaria quiera retirar la tarjeta a 500
residentes y criticó con dureza que la empresa pueda denunciar ante
la Administración de Justicia a estos ciudadanos. Miquel Nadal (UM)
coincidió con Arbona.
Ramon Socias (PSOE) apuntó que mientras el Govern no recupere la concesión del túnel y se deba pagar por su uso, los sollerics deben poder beneficiarse del pago bonificado.