El presidente del Govern balear, Jaume Matas, se traslado ayer a la localidad de Montuïri en una de sus habituales visitas que realiza a los municipios de Balears. La sorpresa fue cuando el grupo municipal del PSM en boca de su portavoz en el Consistorio, Mateu Ginard, aprovechó para denunciar ante el presidente del Govern la actitud «autoritaria» del alcalde Joan Antoni Ramonell.
Ginard manifestó concretamente: «El acto de hoy repercute positivamente en reforzar el consenso y la participación, en el respeto a las minorías y a la consideración de opiniones diferentes, cosa que desgraciadamente no siempre podemos decir de nuestro Ajuntament porque todo lo que significa pluralidad y consenso es sistemáticamente rechazado».
Jaume Matas no entró en valorar la intervención del nacionalista y se limitó a alabar la labor municipal con el Pla Mirall. El alcalde Ramonell tampoco recogió el guante al PSM y dio las gracias a Matas por los 200 millones que ha sufragado el Govern del Pla Mirall.
El alcalde también pidió financiación para cubrir la piscina municipal y recordó que Montuïri es el único municipio que paga un médico por las tardes.