Antoni Cànoves (PSM) y Joan Palerm (PSOE) temen que pueda prevalecer el amiguismo político en la tramitación del expediente de disciplina urbanístico abierto por el Ajuntament de Son Servera contra la empresa Pallicer Pons SA por las obras ilegales llevadas a cabo en la zona de es Forat, junto al polígono industrial. Para el portavoz nacionalista, Antoni Cànoves, «lo mejor sería que para evitar cualquier tipo de suspicacia el alcalde, Francesc Barrachina (PP), remitiera el expediente a los juzgados y dejara que fueran los magistrados quienes se ocuparan de sancionar a Jaume Pallicer por haber arrasado más de 2.000 m2 en una Àrea Natural de Especial Interés (ANEI)».
Cànoves reitera que el delegado de Urbanismo del Ajuntament, Miquel Servera Bauçà (PP), «debería dimitir porque conocía los hechos desde el pasado mes de mayo cuando unos vecinos le denunciaron la existencia de unas obras de excavaciones, presuntamente ilegales, en la zona de es Forat».
El portavoz socialista, Joan Palerm, también se muestra a favor
de que el expediente sea remitido a los juzgados.
Por su parte, el alcalde, Francesc Barrachina, ha manifestado lo
contrario. «Desde el equipo de gobierno tenemos claro que el
expediente no se cerrará hasta que no se haya reestablecido el
terreno dañado», concluyó el batle.