La tramitación de la ordenanza de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) prosigue su curso y ayer pasó por la comisión previa al pleno. El documento contó con el voto a favor del PP, la abstención de PSOE y Vox y el posicionamiento en contra de Més y Podemos. Se trata de un anticipo de lo que se vivirá el próximo jueves, cuando se celebre la sesión plenaria para su aprobación inicial.
Durante la jornada de ayer el regidor de Mobilitat, Antonio Deudero, explicó que se habían rechazado todas las enmiendas al documento presentado por PSOE, Més y Podemos. Entre las propuestas que se tumbaron se encontraba la de ampliar la ZBE hasta Son Rapinya, que se desestimó «porque no forma parte de la fase 1 de su aplicación», explicó Deudero. El concejal advirtió que «tenemos sobre la mesa un proyecto de ZBE que es el mismo que confeccionó Francesc Dalmau», regidor del área en la anterior legislatura.
El concejal de Mobilitat reaccionó a las críticas del PSOE advirtiendo que «el documento no ha sido tocado ni una coma y se aprobó mientras ustedes estaban en coalición», dijo refiriéndose a la oposición. El concejal socialista Óscar Cereijo criticó que «no ha intentado llegar a ni un acuerdo» después de rechazar todas las enmiendas de los partidos de izquierda.
Por su parte, Neus Truyol, regidora de Més, mostró su sorpresa por la falta de enmiendas de Vox y lamentó que «se debería reducir el tráfico fuera de Avenidas, no solo en la zona ACIRE». El objetivo del Ajuntament es que la ZBE entre en vigor el 1 de enero de 2025.