Muchas asociaciones de vecinos se quejan de los problemas burocráticos que les pone el Ajuntamement de Palma a la hora de organizar las fiestas de verano de los barrios. Algunas asociaciones «se han quejado de tener que comunicar con 25 días hábiles al Ajuntament las solicitudes. Eso hace tener una previsión tremenda y desde Cort lamentan la falta de recursos humanos y materiales para gestionar todo», se denuncia desde la Federació d'Associacion de Veïns.
También desde la Fedreació se advierte que «hay asociaciones que se están quejando de que Cort no les envía ni mesas, ni sillas, ni escenarios. O lo hacen con muy poco tiempo». Así, en barrios como Son Sardina dicen que otros años hacían multitud de actos gracias a Cort y ahora «solo nos ofrecen ball de bot».
Ante esta situación, Orgull Llonguet ha convocado para este jueves una reunión con entidades ciudadanas y asociaciones vecinales para «poner en común problemas y dificultades al organizar actividades y dinamizar Palma».
El encuentro tendrá el objetivo de «unir fuerzas con todas las entidades y asociaciones que también padecen estos problemas. Queremos hacer un recopilatorio de experiencias y luchar juntas, tenemos bien claro que la unión hace la fuerza».
Precisamente hace unos días Orgull Llonguet mostraba su malestar por la indiferencia del Ajutament de Palma a la hora de organizar la batalla de agua de Canamunt y Canavall, que reúne a miles de personas y que podría correr peligro por la falta de ayuda municipal.
En el caso de la batalla de agua «este año el Ajuntament no nos aportará servicios externos como baños, servicios sanitarios, ambulancias o socorristas. Se trata de una fiesta grande, participativa y autogestionada, muy importante para muchos ciudadanos, a los que el Ajuntament está dando la espalda».