Vox ha tildado la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de «medida caprichosa que adolece de la base científica necesaria, proporcionada y equitativa». El pasado viernes se acabó el plazo para la presentación de aportaciones para la versión inicial de la ordenanza y los partidos políticos de la oposición han hecho sus propuestas para que puedan aplicarse en el texto definitivo, que deberá estar aprobado antes del 31 de diciembre de este año.
En las alegaciones que ha presentado Vox, advierte que «el texto adolece de importantes vicios sustanciales en las diferentes memorias e informes emitidos» y destaca que en la zona del Casc Antic, donde se ha establecido la ZBE, «no existe ningún indicador que supere los límites establecidos» de contaminación como sí ocurre «en el puerto, Portopí, aeropuerto, Mercapalma, Fan, etc... zonas en los que esos límites podrían ser más elevados».
Vox considera que «son discriminatorias las limitaciones o restricciones que afectan a los titulares de los vehículos afectados», que no podrán circular dentro de la ZBE. Y denuncia que las medidas «se asignan por interés y/o conveniencia política». El partido de ultraderecha echa en falta «una mayor explicación del impacto de dichas medidas» en una zona con «1.500 comercios y 700 establecimientos de restauración» que ya vienen sufriendo «una notable pérdida de peso comercial por las dificultades de acceso, la falta de aparcamiento y el deficiente transporte público».
Por este motivo, propone «un sistema que nos indique la libre circulación cuando el nivel de contaminación esté por debajo de los límites marcados», y que se regule «con colores verde, naranja y rojo» en la entrada a la ZBE.
Por otro lado, Més propone medidas más restrictivas para la circulación en la ZBE que impidan «el acceso, la circulación y el estacionamiento de vehículos de alquiler de los no residentes». Y pide que se expanda a «zonas con problemas como Son Rapinya o es Molinar», entre otros. Además, el partido econacionalista reclama que solo puedan entrar los vehículos de los clientes de los hoteles «siempre que éstos cuenten con aparcamiento propio».
Por parte del PSOE, proponen «la ampliación de la zona ORA en Santa Catalina, Camp d'en Serralta, Es Fortí, Bons Aires, Plaza de Toros, Pere Garau y Foners». Más buses públicos, recuperar el tranvía, ampliar Bicipalma y mejorar los entornos escolares son otras de sus propuestas.