La calle Camilo José Cela amanecía este jueves completamente acordonada y con señales colgando de los árboles de la vía indicando que estaba prohibido aparcar. Los vecinos no tardaron en alarmarse, porque no sabían el porqué de esta situación.
El área de Infraestructures comunicaba este jueves que durante la mañana de hoy se procederá a la tala de tres pinos de gran envergadura que están notablemente inclinados. De hecho, el Consistorio aseguró que hace un tiempo varios técnicos municipales habían hecho una medición y que relativamente hace poco, al hacer otra, habían descubierto que se han torcido aún más.
En concreto, los tres ejemplares presentan una inclinación de 90 grados. También, tienen exudaciones en las partes donde el tronco se dobla, generando fracturas. Por otro lado, una de las copas afectadas, se encuentra dentro de una propiedad privada.
Desde la asociación vecinal de Son Armadans, desconocían la intención de Cort y mostraban su disconformidad con la falta de información del Consistorio. Ya por la tarde, los vecinos se mostraban más calmados al poder ver el informe técnico donde se explica que los tres pinos inclinados pueden causar daños si no se talan. Asimismo, conocían que otro ejemplar está en cuarentena y vigilado para ver cómo se comporta más adelante y que el resto de los que hay en la vía sólo se podarán.