Més y PSOE han denunciado que el Ajuntament de Palma va a desmantelar de manera inmediata la Oficina de Antidesahucios, ubicada en la calle Ferreria, «para convertirla en la Oficina Antiokupación y del Alquiler Turístico, que estará abierta el 1 de julio». Se cumpliría así uno de los puntos fundamentales del Pacto Programático ente PP Vox, donde éste último exigía la apertura de unas dependencias para atender los casos de okupación y de alquiler turístico. También advierten que este miércoles se disolverá el Patronat de l'Habitatge, que este año ha cumpliado cuarenta años de vida y se encarga de gestionar las viviendas municipales.
Funcionarios de esta oficina han señalado que este martes han sido informados de los cambios, que supondrá que una gran parte de los trabajadores sociales de Antidesahucios serán trasladados para llevar a cabo otras labores dentro del Consistorio. «Nadie nos dice nada, solo que son órdenes de arriba», advirtieron los funcionarios.
La Oficina Antidesahucios tiene la agenda completa hasta mediados de julio y cada mes atienden a un centenar de familias «que son citados por un gran tenedor para su lanzamiento o tienen un fin de contrato de alquiler. En este caso muchos de los afectados son personas mayores de ochenta años y el propietario les exige devolver la vivienda por fin de contrato o para sus hijos. En este caso, les buscamos una alternativa residencial pero no encontramos nada por los precios de la vivienda». Por otro lado, la Oficina Antidesahucios apenas atiende un caso al mes por okupación de vivienda.
Por su parte, Neus Truyol, portavoz del grupo municipal de Més, denunció que «la Oficina de Antidesahucios estará cerrada el 1 de julio y quedará totalmente desmontada. Las trabajadoras sociales serán remitidas a Benestar Social y solo dejarán en la antigua oficina a algunos administrativos». Truyol advirtió que «el PP está totalmente sometido a Vox. El alcalde Jaime Martínez ha elegido bando y es el de los grandes propietarios, dejando de lado a las familias que viven de alquiler». La portavoz de Més per Palma calificó esta decisión de «imperdonable con la crisis habitacional que estamos viviendo en el alquiler y las hipotecas. Esto es indecente, inhumano».
A su vez, la regidora del PSOE Angélica Pastor advirtió que «este miércoles se ha convocado el consejo rector del Patronat de l'Habitatge y se va a llevar a cabo la internalización del personal de este servicio pero no sabemos cómo se van a llevar a cabo las funciones que llevaban a cabo hasta ahora en el Patronat».
Pastor señaló que «tampoco sabemos quién se encargará del mantenimiento de las viviendas municipales ni de emitir los informes de vulnerabilidad, que impiden los desahucios. Ahora los trabajadores sociales de la Oficina de Antidesahucios tendrán que llevar a cabo más labores» al alto número de familias que acuden al Ajuntament en busca de una alternativa de vivienda.
La concejala socialista incidió además en una cuestión candente: «Si no existe el Patronat de l'Habitatge ¿quién gestionará las 1.200 viviendas sociales que se construirán en los suelos municipales que anunció hace dos semanas el alcalde de Palma? Van a provocar que las promotoras que construyan estas viviendas se conviertan en grandes tenedores».
Fuentes del Consistorio negaron el cierre de la Oficina de Antidesahucios, «lo que hace Urbanismo es reorganizar algunas áreas atendiendo al hecho de que la vivienda es un tema prioritario como ha quedado patente con la presentación de un Plan de Choque y otras medidas que se irán anunciando. No se va a suprimir ni desmantelar nada, todo lo contrario. Se reforzarán algunos servicios como Vivienda y otros».