El consejo de administración de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) ha aprobado unas nuevas bases para la creación de una bolsa de conductores de autobuses, que eliminan el requisito lingüístico del catalán y reducen las medidas de paridad de género preestablecidas, pasando de la cuota femenina del 40 al 25 por ciento. Así lo ha denunciado este jueves el PSOE de Palma, que ha mostrado su preocupación y descontento «por el nuevo giro de política» de la empresa pública.
«En los últimos años, la EMT de Palma ha destacado por aplicar criterios de selección basados en mérito, capacidad e igualdad, exigiendo como mínimo un nivel A2 de catalán en la categoría de personal de conducción. Sin embargo, con esta nueva regulación, esta exigencia ha sido eliminada», señalaron los socialistas, que consideran esta decisión «un retroceso en la promoción de la lengua catalana, esencial para la identidad cultural de Balears».
Por otro lado, el PSOE advierte que se ha modificado la cuota de reserva para mujeres en colectivos predominantemente masculinos, «pasando del 40 al 25 por ciento. Esta decisión contraviene el Plan de Igualdad del Ajuntament de Palma, diseñado para fomentar un equilibrio más justo entre sexos, especialmente en sectores laborales donde los hombres son mayoría».
El PSOE ha solicitado explicaciones urgentes al equipo de gobierno, reclamando «transparencia sobre los motivos que han conducido a estas significativas modificaciones. En noviembre de 2023, la EMT aprobó una convocatoria que mantenía los estándares de conocimiento de catalán y paridad de género. El contraste con las nuevas bases aprobadas hoy es, según los socialistas, un claro indicativo de regresión en políticas de igualdad y promoción lingüística».
«La respuesta del PP, actualmente en el poder, parece indicar una nueva orientación en las políticas de gestión del personal que podría afectar negativamente la cohesión social y la igualdad de oportunidades en el ámbito municipal». El PSOE ha instado a una revisión de estas bases y un retorno a los principios de igualdad, mérito, capacidad y publicidad «que siempre han regido en la EMT de Palma».
Por su parte, el regidor de Més per Palma, Miquel Àngel Contreras, ha valorado muy negativamente «este nuevo ataque a la lengua catalana por parte del PP, ya que a partir de ahora los conductores de la EMT no necesitarán conocer la lengua propia de Mallorca para desarrollar su trabajo. Por tanto, la ciudadanía no tendrá garantizado su derecho a ser entendida y atendida en catalán en el transporte público de Palma».
«Es decir, puede ocurrir que una persona pida información en catalán a un chófer de un autobús público y que este se niega a darla o que no le entienda. Esta situación puede dar alas a comportamientos discriminatorios y vejatorios hacia los catalanoparlantes. De hecho, esta semana ya hemos visto publicada una denuncia de una usuaria del TIB en este sentido», dijo Contreras.
«Solo cuatro días después de la gran manifestación en defensa de la lengua que tuvo lugar en la Plaça Major, el PP demuestra que su política está dictada por los deseos y el odio de Vox. El PP y Marga Prohens quieren vender humo asegurando que no cometerán más ataques a la lengua y que cumplirán con el Estatut, pero los hechos diarios demuestran lo contrario», dijo el regidor de Més.
Por otro lado, Contreras señaló que «el alcalde Martínez vuelve a plegarse a los directos de la ultraderecha en otra de sus obsesiones, la igualdad entre hombres y mujeres y el feminismo. El bolsín aprobado disminuye en un 15 por ciento el número de plazas destinadas a mujeres».
Por su parte, la Obra Cultural Balear (OCB) ha denunciado en sus redes sociales «otra agresión contra los derechos lingüísticos de los catalanoparlantes. El Ajuntament de Palma elimina el requisito del catalán para los conductores de la EMT de Palma. Este no es el camino. Rectifiquen. Decenas de miles de personas lo reclamamos. ¡Sí a la lengua!». Antes de la modificación de los requisitos para ser conductor de la EMT, se pedía el título A2 de catalán.
AgermanatSe merecen el respeto que ellos dan y no es otro que IMPONER el catalán en trabajos con tal de que su % catalanista que anda pero que muy mal en las encuestas debería haber sido un mérito y no una obligación. Es más ¿Para que quiere un conductor del tren de Inca hablar en catalán cuando va encerrado en su cabina? ¿Acaso no se acuerdan del "Prohibido hablar con el conductor" en los autobuses? y que por cierto está vigente ¿Para que quieren que hablen catalán si no pueden hablar con el pasaje? está claro que era una imposición más. Que sea un mérito, pues bien, como el que habla inglés en buses en zonas turísticas, pero nada más. Estoy en las antípodas de la ideología del PP y Vox, pero cuando las cosas son correctas, pues se aplauden y esa lo es.