Debía ser una firma institucional sin más pero la polémica estaba servida con un ambiente cargado desde días anteriores. El alcalde de Palma, Jaime Martínez, y el regidor de Urbanisme, Óscar Fidalgo, habían calentado el ambiente ayer, esperando la visita del directora general del SEPES, Leire Iglesias, para la firma del protocolo para el desarrollo de viviendas sociales en Son Busquets. Este miércoles se presentó el anteproyecto del Plan Especial de Son Busquets pero el Plan Especial definitivo podría estar listo antes de verano. Será entonces cuando Ajuntament y Govern tendrán que aprobarlo para así comenzar con el proceso de urbanización, el paso previo a la construcción de las viviendas.
Iglesias advirtió que «ningún barrio se decide en un despacho, ni en Madrid ni en Palma. Lo deciden los ciudadanos, que son los que los disfrutan y hablan de sus necesidades», haciendo referencia a la polémica concentración de vecinos convocada por el Ajuntament a las puertas de Son Busquets el pasado martes. «Esta será la primera convocatoria de muchos encuentros y es necesaria la colaboración, que es a lo que hemos venido», arrancó Iglesias, que ya le dejaba un primer recado a Martínez y Fidalgo, presentes en el acto.
«Esta propuesta ya es vuestra. No es una ocurrencia de una mañana. En ella han trabajado técnicos del SEPES que se conocen el cuartel casi al dedillo. Y todo esto viene de un trabajo previo de la corporación municipal de la anterior legislatura, que no sólo se ha regido por el Plan General de 2023 sino por la memoria social y de la ambición que se dio en aquel momento, que apostó por seguir la Agenda Urbana».
«No solo se trata de reconvertir un solar en desuso: tiene visos de futuro para crear un entorno de ciudad», advirtió la directora general del SEPES. Durante su intervención hubo alusiones a las declaraciones que durante los últimos meses ha ido realizando el equipo de gobierno de Cort, que ha sido muy crítico con el Gobierno central por este proyecto. «Ha habido transparencia y la documentación se ha ido publicando como se hace siempre, en el portal de transparencia. Parecía que predicábamos en el desierto pero ha habido muchas decisiones que tomar, que no ha sido fácil. Parecía que no hacíamos nada pero hemos seguido trabajando», añadió Iglesias.
Frente a las críticas por falta de información y de equipamientos públicos de algunas asociaciones vecinales que fueron citadas por Cort frente al antiguo cuartel, Iglesias advirtió que «Son Busquets es un gran espacio que se hará pensando en la ciudad. El 58 por ciento de la superficie se dedicará al uso público y sale de esa memoria social, tras un proceso de escucha de la ciudadanía de Palma, que tendrá en cuenta la eficiencia energética, la necesidad de agua, que prevé la pobreza energética y con soluciones para el tráfico rodado».
Iglesias señaló que «se respetarán las alturas» de los nuevos edificios, teniendo en cuenta «la continuidad de lo construido en la ciudad porque así nos lo habéis pedido. Se reservarán parte de los equipamientos para otras necesidades y con dotaciones para jóvenes, trabajadores y mayores». Porque a esas 831 viviendas sociales se sumarán además, otras 672 plazas de alojamientos dotacionales adicionales.
La prontitud con la que se pueda aprobar el Plan Especial está en manos también del Ajuntament, tal y como señaló Iglesias: «Ya que el alcalde nos ha mostrado su voluntad, le pedimos que nos ayude a completar este trabajo para lograr el mejor Son Busquets posible. Les traslademos las peticiones que nos han hecho llegar de movilidad. El Ajuntament puede hacer aportaciones». Iglesias recordó el artículo 47 de la Constitución española, en el que «los ciudadanos tienen derecho al acceso a una vivienda digna de calidad. Y también a un precio razonable, le faltaba decir».
El delegado del Gobierno en Balears, Alfonso Rodríguez, también aprovechó la ocasión para lanzar su mensaje: «En problemas complejos las soluciones no son sencillas. Si hay un problema constatado por todos, es necesario el esfuerzo de todos. Y la manera más inteligente para solucionarlo es la colaboración interinstitucional. Porque al final da igual el color político: necesitamos mejorar la vida de nuestros ciudadanos».
Rodríguez recordó que lo que se ha presentado este miércoles «es una propuesta inicial. Es la base para llegar a un acuerdo definitivo dentro de cuatro meses para que nos lleve a un desarrollo definitivo». El delegado del Gobierno mostró su satisfacción por la firma, «es un día para alejarse del ruido y seguir pese a las críticas. Insisto en todo momento en que lo fundamental es buscar una solución. Los desencuentros y las críticas generan problemas, por lo que es necesario un trabajo conjunto».
Rodríguez agradeció el trabajo de la corporación municipal anterior, dirigida por el senador socialista José Hila, que estuvo presente en el acto. También acudió a la firma la anterior regidora de Model de Ciutat, Neus Truyol, de Més, y parte del anterior equipo de Urbanisme. «No solo agradezco el trabajo de la corporación anterior y la del SEPES, sino a la corporación actual en esta búsqueda conjunta de soluciones a y todos aquellos que trabajan para dar vivienda a la ciudadanía. La suma del esfuerzo de todos es lo que nos va a dar el éxito».
Por su parte, el alcalde de Palma, Jaime Martínez, advirtió que «se firma por primera vez un documento para hacer realidad lo que todos queremos, un realidad para Palma y también para los barrios colindantes. Este protocolo incluye la intención del SEPES para tramitar cuanto antes el Plan Especial y también la del Ajuntament para ser lo más ágil en tramitarlo». Martínez agradeció la firma del protocolo y señaló que «tenemos que ir mucho más allá. Seguimos reclamando el documento del Plan Especial. Este es un primer paso para que en los próximos días se lleve a cabo una comisión mixta que va incluida en el protocolo de intenciones».
Martínez aprovechó su intervención para señalar que «el Ajuntament no pretende bloquear el posible desarrollo de Son Busquets, sino reclamar un posible inicio formal del proyecto. El Ajuntament quiere que Son Busquets sea una realidad lo antes posible». El alcalde abogó por «involucrar a los vecinos de los barrios colindantes que sufren el abandono de 25 años de este espacio. Éste es un protocolo de cuatro años, prorrogable cuatro años más, pero pediría que este año podamos tener el Plan Especial. Queremos involucrarnos al máximo».