ARCA cuestiona el cambio de ubicación de la estatua de Antoni Maura, que se desplazará al centro de la plaza para alejarse del ficus, que será un árbol catalogado. La entidad responde así al preproyecto que ayer presentó el regidor de Urbanisme, Óscar Fidalgo, que se reveló en la Comisió del Centre Històric que se celebró este martes.
«Nos preocupa el cambio de ubicación del monumento dedicado a Antoni Maura obligado por el crecimiento del ficus. De hecho consideramos que se debería cuestionar este cambio», señala la entidad. «Tenemos dudas de si un solo árbol ha de condicionar la ordenación de toda la plaza. Un ficus, que seguramente admite podas y del cual se debería de controlar la extensión aérea y subterránea. Si se opta por cambiar la ubicación, exigimos una recreación previa in in situ para evaluar el impacto en las visuales del entorno».
Por otro lado, han mostrado su preocupación «por la despersonalización de la plaza. igual que ha pasado en muchos pueblos y rincones de Palma, por la implantación de la plataforma única. Se debería garantizar la accesibilidad manteniendo una diferencia de alturas. Sino se han de poner una gran cantidad de bolardos verticales (alos) que impactan y vulgarizan el paisaje».
Desde Arca advirtieron respecto al quiosco del bar Alaska que «se ha de conservar la imagen que conocemos. El crecimiento debería ser mínimo. El concurso de adjudicación de la gestión debería garantizar que el tipo de producto que ofrece es similar y los precios también. Si no es así, no tendría sentido un quiosco en esta plaza pública».
Arca confía en «la voluntad de diálogo y flexibilidad se demuestre en un proyecto vital para la ciudad y su patrimonio. Hemos de conseguir el mejor resultado que también tenga en cuenta a los vecinos de la zona».