Més per Palma ha pedido la suspensión del decreto ley de medidas urgentes de vivienda ya que, aunque «algunas aportaciones podrían ser válidas», en general las medidas aprobadas pueden ser «contraproducentes y provocar problemas graves».
La regidora de Més Neus Truyol advirtió que esta nueva normativa «provocará a medio plazo barrios y pueblos dormitorio sin espacios verdes, equipamientos, servicios o comercios suficientes».
Truyol advirtió que la iniciativa del Govern «perjudica la buena planificación de Ciutat y supone un incremento de la densidad poblacional sin ningún tipo de medida para incrementar los equipamientos y las zonas verdes que dan los servicios necesarios a los nuevos vecinos».
Por otro lado, la medida que debería aliviar el problema de la vivienda supone «aplicar una amnistía en suelo urbano, con la concesión de cédulas de habitabilidad a viviendas que han incumplido la normativa urbanística». El cambio de uso turístico a residencial tampoco se libra de las críticas de la regidora de Mes, ya que significa «ofrecer más beneficios al sector hotelero».
Truyol, que durante la legislatura anterior había ocupado el cargo de concejala de Model de Ciutat, denunció que «este decreto ley no se ha trabajado con los agentes sociales víctimas de la crisis habitacional y la especulación inmobiliaria, como la Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH) o las asociaciones de vecinos».