Los comerciantes y vecinos de la popular calle de Jaume III, en el centro de Palma, han amanecido esta mañana con una peculiar estampa: unos gamberros habían movido durante la noche las pesadas macetas y las habían colocado en medio de la acera, de forma que los peatones tenían que sortearlas.
A primera hora de la mañana, en cuanto los primeros vecinos han bajado a la calle, se ha descubierto el acto vandálico. Algunos afectados han comentado que han intentado mover las plataformas, pero eran demasiado voluminosas. Poco después han abierto los primeros negocios y los comerciantes se han quejado, porque las macetas entorpecían el tránsito peatonal.
El Ajuntament ha sido informado y rápidamente ha enviado a unos funcionarios a colocar en su lugar las macetas. La Policía Local de Palma también ha sido informada de la gamberrada.