La Policía Local de Palma multó el año pasado a 2.315 conductores de patinetes, un 74 por ciento más que en 2021, cuando se impusieron 1.329 sanciones, mientras que en el mismo periodo de tiempo se registraron 330 accidentes. La regidora de Seguridad Ciudadana, Joana Adrover, ha hecho balance en rueda de prensa de las campañas de control de patinetes y ha añadido que estas sanciones han supuesto un total de 77.424 euros.
La mayoría de las infracciones (1.025), ha explicado, son por circular sin elementos reflectantes; 664 por no llevar luz o timbre; 135 por circular con un acompañante; 111 por usar auriculares mientras se conduce y 109 por hacerlo por aceras o espacios peatonales.
Según han recordado, los infractores se enfrentan a unas sanciones que van de los 50 a 200 euros.
Adrover ha instado a «no criminalizar» las nuevas modalidades de movilidad, aunque sí que ha reclamado el respeto a las normativas para mejorar la convivencia. «El patinete tiene que quitarle espacio al vehículo privado y nunca tiene que quitarse espacio ni seguridad a los peatones», ha indicado. Este extremo, ha añadido, «es la línea roja».