El Ayuntamiento de Palma ha presentado este lunes el nuevo catálogo 2023 de ayudas y prestaciones del área de Bienestar Social, destacando que la ciudad mallorquina, junto con Bilbao, es la que da acceso a más ayudas económicas, porque su límite de ingresos es más elevado. «Todos los ciudadanos que ingresan menos de 1.167 euros al mes tienen acceso a las ayudas, muy por encima de Sevilla o Cantabria, que están en segunda posición, con el límite en 900 euros al mes», ha explicado el regidor de Cultura y Bienestar Social, Antoni Noguera.
Según ha indicado el Consistorio en nota de prensa, el nuevo catálogo, que entra en vigor el 1 de marzo de 2023, incrementa «significativamente» el baremo de ingresos máximos para acceder a las ayudas. Así, pasa de usar el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) como referencia, saliendo de indicadores como el Iprem, para ajustarse más «a las necesidades reales».
En este punto, la coordinadora general de Bienestar Social, Catalina Trobat, ha subrayado que «cada ayuda es coherente en los datos, resultando del estudio sobre el salario de referencia local para una vida digna». «Este estudio nos ha servido de aval científico para valorar la necesidad de ingresos y, por tanto, hemos actualizado las condiciones de acceso para dar una cobertura más amplia y ajustada», ha añadido.
El nuevo catálogo de 2023 aumenta las ayudas teniendo en cuenta el número de personas que conforman las unidades de convivencia. Por ejemplo, un núcleo de dos adultos y dos menores recibía ayudas por valor de 16.543 euros en 2018 y, a partir de este mes de marzo, recibirá 22.540 euros, según el Ayuntamiento.
En detalle, si la unidad de convivencia está formada por una persona, recibirá 14.000 euros anuales; si son dos, 17.500 euros; si son tres, 20.125; si son cuatro, 22.540; si son cinco, 25.245; si son seis, 27.012, y si son siete, 28.092 euros. Por otro lado, las ayudas dentro de la cesta básica aumentan un 50 por ciento y ofrecen nuevas prestaciones, como la ropa y calzado para niños de 0 a 16 años, y con una cuantía máxima de 200 euros por beneficiario y año. También contempla ropa y calzado profesional, una nueva modalidad de ayuda de incorporación social.
Asimismo, el catálogo introduce la deducción del 25 por ciento de los ingresos computables en el caso de familias monoparentales que conforman un único núcleo familiar y a las víctimas de violencia de género. Cabe recordar que, según el Consistorio, estas ayudas económicas de emergencia tienen un carácter extraordinario y están destinadas a paliar las situaciones de personas afectadas por un estado de necesidad.
Por tanto, sirven para cubrir gastos que originan necesidades específicas de carácter básico y urgente, como por ejemplo alimentos, productos de higiene, luz y gas, escoletas o becas formativas, así como desahucios o alojamiento por emergencia, entre otras.