El Ajuntament de Palma ha aprobado en Junta de Govern conceder ocho días hábiles a la propiedad de las gasolineras de las Avenidas y de la Plaza Progrés para que cesen su actividad comercial y para que inicien los trámites para desmantelarlas y devuelvan los terrenos «en su estado original», según informó la regidora de Participació Ciutadana, Claudia Costa.
De esta forma, Cort cierra un proceso administrativo que comenzó hace dos años y que tiene el objetivo de recuperar el dominio público de unas concesiones que caducaron en el año 2008. Cabe recordar que las dos gasolineras, que pertenecen a la empresa «Pedro Llompart y Antonio Pieras SA» , comenzaron su actividad en el año 1958 y que tenían una concesión durante 50 años. La autorización se acabó, pero la empresa siguió con su actividad con normalidad hasta que, desde el Ajuntament, se le requirió que la paralizará. En ese momento la propiedad intentó frenar el proceso interponiendo una serie de contenciosos y recursos que el área de Participació, con la aprobación del expediente de recuperación, da por concluido. Se da la circunstancia además, recordó Costa, que la empresa lleva desde el año 1985 sin pagar el canon municipal correspondiente.
Este desahucio administrativo, según destacó la regidora, «no tiene marcha atrás» ya que, aunque reconoce que algunos de los contenciosos no están cerrados, «tampoco hay medidas cautelares, así que podemos instarles a que nos presenten, en el plazo de ocho días hábiles, un proyecto de desmantelamiento». El Ajuntament se agarra, en este sentido, a la caducidad del titulo habilitante. Desde el Consistorio no se aventuran a confirmar el plazo para eliminar los surtidores y los depósitos de las dos gasolineras, «estamos pendiente de saber que nos dice la empresa» y rechazaron la posibilidad de que se intente dilatar la decisión mediante más recursos o mecanismos judiciales ya que, destacaron, «administrativamente tenemos instrumentos para obligarles a parar la actividad». La regidora, asimismo, recordó que en ambas ubicaciones están previstos grandes proyectos urbanísticos municipales, una zona peatonal con zonas verdes y un parking subterráneo en la Plaza de Progreso y el tranvía, en relación con la de las Avenidas.
El caso de la gasolinera situada en Santa Catalina es especial ya que, durante los estudios para realizar el aparcamiento subterráneo se detectó que el tanque tenía fugas y que el subsuelo estaba contaminado. Esto implica, según comentó Costa, que los proyectos de rehabilitación «para recuperar el espacio en su estado original», tendrán que pasar obligatoriamente por la Conselleria de Medi Ambient, además de por Urbanisme del Ajuntament.