La concesionaria de las grúas municipales no está cumpliendo el pliego de condiciones que firmó con el Ajuntament de Palma y, en plena temporada alta, sólo mantiene un vehículo operativo por las noches para atender todas las incidencias que se puedan producir, según denunció el regidor del PP, David Díez en sus redes sociales. Díez, que basa su denuncia en las quejas que ha recibido por parte de agentes de la Policía Local, asegura que el incumplimiento de los servicios mínimos acordados dificulta el trabajo de las fuerzas de seguridad en unos tramos horarios, los nocturnos en verano, en los que suele haber muchas incidencias.
El pliego de condiciones que firmó la empresa con el Consistorio establece unos servicios mínimos que varían según la época del año, el día de la semana y el turno. Así, por ejemplo, entre el 1 de octubre y el 31 de mayo, tiene que haber operativas 6 grúas por la mañana entre semana y dos o tres los fines de semana y 4 o dos durante el turno de tarde. El servicio, por el aumento de población, se incrementa durante el periodo entre el 1 de junio y el 30 de septiembre, cuando durante los días laborables debe haber entre 7 y 5 grúas según la hora y entre dos y tres vehículos las noche del jueves al domingo.
El problema, según el regidor, es que en las últimas semanas el servicio nocturno se ha limitado a una grúa incluido los fines de semana de tal manera, denuncia «que si hay un accidente o un control en el que haya que retirar coches todos los demás servicios dejan de cubrirse o sufren retrasos de tres o cuatro horas». De hecho, apunta el edil, «ya hay muchos agentes que, antes de tener que esperar varias horas a la grúa, prefieren sancionar al vehículo sin solicitar su retirada».
Es por eso que Díez exige que la mesa de contratación del Ajuntament actúe de oficio y que, o bien rescinda el contrato, o que exija a la empresa concesionaria que cumpla lo pactado. El regidor recuerda que la empresa ya tuvo problemas con sus trabajadores a final del año pasado, cuando estos convocaron una huelga argumentando «amenazas, presiones para retirar más vehículos de la vía pública, falta de personal y exceso de trabajos». En aquel momento la protesta, en la que también se denunciaba «horas extras forzadas» se mitigó sin que se hayan solucionado los problemas.