El Ajuntament de Palma está reforzando su departamento de tramitación de multas para evitar el colapso del servicio debido al incremento de sanciones que se está registrando en el municipio en los últimos meses tras la puesta en marcha, el año pasado, de tres nuevos radares de control de velocidad en las calles del municipio.
De esta forma, según confirma el regidor de Mobilitat, Francesc Dalmau, al departamento se incorporarán en las próximas semanas tres nuevos auxiliares para agilizar la tramitación de las sanciones toda vez que, según fuentes no oficiales, las sanciones se han duplicado respecto al año pasado. El propio regidor reconoce que ha habido un incremento importante de expedientes, «es normal cuando se instalan nuevos elementos como los radares», pero dice que no se ha llegado a doblar su número y en vez hablar de un departamento saturado se refiere a la «altísima carga de trabajo» que justifican el refuerzo solicitado.
«Ya hemos pedido tres nuevos auxiliares que se sumarán al que se ha incorporado hace unas semanas. Confiamos en que irán llegando poco a poco y que el departamento se pueda poner al día lo antes posible». Dalmau, en este sentido, asegura que el objetivo es que en un plazo entre seis y nueve meses el área haya superado los retrasos que acumula.
La propia defensora de la Ciudadanía, Anna Moilannen, lleva meses denunciando que la falta de personal en el servicio de multas afecta a la comunicación de las infracciones a la ciudadanía y a los derechos para recurrir que tienen los sancionados.
Estos retrasos por déficit de efectivos se agravaron a finales del año pasado cuando se detectó que cuatro repartidores de la empresa concesionaria no notificaron un número de multas aún por determinar y falsificaron el acuse de recibo.
Los cuatro trabajadores fueron detenidos, la Policía aún está investigando el alcance del fraude y muchos ciudadanos, que no habían sido informados de la sanción en tiempo y forma, vieron como las multas llegaban con el recargo correspondiente.
El apunte
Nueve radares y dos ‘foto-roja’ para detectar infracciones
El área de Mobilitat tiene actualmente instalados nueve radares para controlar infracciones de velocidad y dos puntos de ‘foto-roja’ que detectan vehículos que se saltan semáforos en las calles de Palma. El año pasado Cort informó que se habilitaban tres nuevos radares en las calles Pascual Ribot, Aragón y Pompeu Fabra que se unían a los ya existentes en la avenida Gabriel Roca, calle Manacor, Miquel Lladó, dos unidades en el Camí de Son Rapinya y en la carretera militar.