Si bien su arranque oficioso fue el domingo con la artista Marina Abramovic, la inauguración oficial del Atlàntida Mallorca Film Fest tuvo lugar ayer por la noche con la entrega al cineasta irlandés Neil Jordan del premio honorífico Masters of Cinema, que agradeció y que constituyó el plato fuerte de la noche. Antes, la cantante catalana Rita Payés ofrecía su estilo folklórico para abrir boca mientras que el postre de la velada recaía en la metafílmica cinta de Andrea Bagney Ramona, protagonizada por Lourdes Hernández, Russian Red. El accesorio por excelencia de la noche fue sin duda los abanicos. Sus vaivenes y aleteos estuvieron presente toda la ceremonia porque el calor, aunque ha dado un libero respiro, no da tregua. Así pues, los invitados y asistentes combatían el calor abanicándose y refrescando los gaznates con cerveza y otros refrigerios.
El ambiente, eso sí, fue de reencuentro. Muchos se abrazaban y, por fin, dando por olvidada la época en la que el contacto estaba casi prohibido. Entre los asistentes, un poco de todo. Desde políticos como la presidenta del Govern, Francina Armengol, que agradeció a Jaume Ripoll, el «alma de todo esto», su empeño, hasta gente de la cultura como Agustín Fernández Mallo, Victòria Morell, Pablo Simón y Lara Martorell, entre otros.
Cristina Llambias, Pere Malondra, Pedro Barbadillo, Catalina Solivellas, Andreu Serra, Bel Busquets, Catalina Cladera, Jaume Ripoll, Francina Armengol, José Hila, Antoni Noguera, Elena Navarro, Juan Pedro Yllanes, Miquel Company, Neus Truyol y Josep Mallol.
Poco después de las nueve, con el cielo casi del todo oscurecido, las autoridades políticas iniciaron sus parlamentos, arrancados por el alcalde de Palma, José Hila, continuados por Catalina Cladera, presidenta del Consell, y cerrados por el propio Jaume Ripoll, fundador de Filmin y director del festival, quien habló para señalar que «la clave del Atlàntida son las películas que no dan respuesta, sino que nos hacen dudar». Tras él, la voz se tornaría melódica con el concierto que Rita Payés regaló fusionando estilos folclóricos, jazzísticos y de bosanova elevando el sentir de un público que ocupó todas y cada una de las sillas e incluso tuvo que ingeniárselas para lograr asientos.
Uno de los momentos de la noche fue la entrega del Master of Cinema a Neil Jordan, precedido del error del pase de un vídeo de presentación sobre Sergei Loznitsa, el galardonado de hoy, al que el premiado restó importancia con un comentario jocoso. El cineasta agradeció el reconocimiento y alabó «encontrar otra forma de celebrar el cine». Finalmente, Ramona, cinta de Andrea Badgley protagonizada por Lourdes Hernández, dando un arranque mágico a la décimo segunda edición del Atlàntida para llenar Palma de cultura.