El Ajuntament de Palma achaca a los clientes de comida para llevar el exceso de basura en las papeleras, especialmente en el centro y en la Platja de Palma. El regidor de Medi Ambient i Benestar Animal, además de presidente de Emaya, Ramon Perpinyà, señaló que «tenemos un problema real con el take away. Está pasando que se satura una papelera, que se ha vacía y que a las veinte minutos esté de nuevo desbordada porque el volumen de residuos que se está generando es enorme». Durante la comisión de pleno de Urbanismo y Medio Ambiente, Perpinyà señaló ayer que «de enero a junio se instalaron 198 nuevas papeleras» con una mayor capacidad, pasando de 50 a 120 litros. Sin embargo, no parece ser suficiente.
«Entendemos que el número de papeleras empieza a ser importante y se ha duplicado el servicio de vaciado, con un refuerzo en verano», señaló Perpinyà, que advirtió se están limpiando estos depósitos por la mañana y por la tarde. Sin embargo, el incremento del turismo está dejando un rastro de basura que se traduce en papeleras repletas de envoltorios, la mayoría de ellos de alimentos que se están comiendo en la vía pública. A estos hay que sumar en la zona de la plaza de España la concentración de jóvenes que acuden a restaurantes de comida rápida.
Al límite
«La idea es hacer que desaparezcan los envases de un solo uso y que se puedan reutilizar. Ahora mismo estamos reforzando al límite el servicio de vaciado de papeleras», explicó. El regidor añadió que «otros años el desbordamiento de las papeleras era más generalizado por toda Palma pero ahora hay puntos muy localizados, donde hay más comercio de take away. Hemos propuesto poner contenedores más grandes pero los propios comercios nos dicen que estéticamente son feos y no los quieren». Fulgencio Coll, de Vox, pidió intensificar «aún más el refuerzo de verano».