El Ajuntament de Palma, a través de los controladores medioambientales, levantó durante el año pasado 630 actas por incumplimiento de la ordenanza municipal relativa a la limpieza como, por ejemplo, tirar las bolsas de basura en lugares u horas no autorizados, abandonar trastos en días que no corresponde por zonas o no recoger los excrementos de los perros, según comentaron el alcalde del municipio, José Hila, y el presidente de Emaya, Ramón Perpinyà, durante la presentación de una campaña para evitar actos incívicos.
La iniciativa, que consiste en la colocación de carteles disuasorios en 215 puntos de la ciudad junto a papeleras y contenedores, se irá desarrollando de forma progresiva según destacaron los responsables municipales. La idea, apuntaron, es poner en marcha una primera fase inicial y, posteriormente, se ira instalando la cartelería en aquellas zonas donde se detecten más incumplimientos y problemas.
Los mensajes de los carteles son del tipo «Fica'm dedins. Tu pots» o «No siguis trasto» y recuerdan a la ciudadanía la obligación de cumplir los horarios y las normas elementales de convivencia y limpieza según destacó Hila. En este sentido, el alcalde recordó que todos los esfuerzos del Ajuntament y de Emaya «no sirven» si no existe la ayuda y el compromiso de los ciudadanos por mantener limpia la ciudad por lo que pidió su colaboración.