La propiedad del Hotel Artmadams ha alegado en contra del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) del Ayuntamiento y se ha opuesto a la protección del edificio donde se ubica este establecimiento, al argumentar que la ficha «Catálogo de Elementos y Espacios Protegidos» es «errónea». De acuerdo con la propiedad, las fotografías de la ficha recogida en el PGOU de Palma «no se corresponden al estado actual» de este edificio, ubicado en la calle Marqués de la Sénia y característico por la obra mural de su fachada de la mano de José Luis Mesas. En una nota, han señalado que las sucesivas alteraciones ejecutadas en el inmueble hacen que el edificio «no conserve prácticamente nada» del proyecto de reforma que en 1940 elaboró el arquitecto Guillem Forteza y que, según la ficha, es lo que le haría acreedor de protección.
A las alegaciones presentadas respecto al PGOU, se une un informe pericial elaborado por el arquitecto y arquitecto técnico Bernardo Oliver Jaume, en el que consta que el edificio, desde su reforma por parte de Forteza, ha sido objeto de una «masiva» reestructuración de su distribución. Así, la propiedad ha manifestado que se ha triplicado el volumen original del proyecto, hasta el punto de añadirse dos plantas más que las que tenía originalmente, y que se ha cambiado de uso hospitalario a residencial público y sus fachadas han sido objeto de modificaciones y añadidos, entre otros aspectos. «Del proyecto original de 1940 no queda ni una sola fachada que respete su diseño original, ya que en mayor o menor medida se ha modificado su volumen, alturas y configuración», ha remarcado el arquitecto.
Para Oliver, no tiene sentido establecer una protección a un edificio que, con el paso de los años desde su diseño y construcción, «ya no se encuentra en el entorno en el que fue proyectado, ni se dedica al uso por el que fue concebido ni conserva las características que se pretenden proteger». De este modo, la propiedad del Hotel Artmadams insiste en que no cabe proteger «lo que ya no existe» «y que, en el edificio de referencia, poco o nada queda del proyecto de Forteza». Desde la propiedad han sugerido que debe suprimirse la ficha referida en el PGOU o que, de forma subsidiaria, se deben concretar qué extremos o detalles del inmueble deben ser protegidos como propios de la obra de Forteza.