La Federación de Asociaciones de Vecinos ha presentado sus alegaciones al futuro Plan General de Palma en la que piden, entre otras cuestiones, que se limite el crecimiento de población, que se proteja más el suelo público, que se haga un estudio económico sobre los ingresos y gastos de la expansión urbanística y que en los futuros proyectos de edificación se exija un estudio paisajístico del entorno.
Así, en una nota, la federación desgrana las principales aportaciones que ha hecho para mejorar el documento que marcará el futuro urbanismo de Ciutat y, por ejemplo, aunque son partidarios del crecimiento cero de población, proponen un aumento moderado del 0,35 por ciento, la mitad de lo que plantea el texto, «para bajar también la necesidad de suelo urbanizable».
En lo que se refiere a la memoria económica del texto, los representantes vecinales abogan por su revisión ya que, aseguran, «hay muchos errores en las fichas, justificación excesiva y mucha diversidad con la rentabilidad entre zonas urbanizables, ya que algunas no serán rentables y otras demasiado».
La federación aprovecha su escrito para valorar positivamente los aspectos relacionados con el transporte público y consideran beneficiosa la red transversal de las líneas de autobuses, el refuerzo previsto hacia la Platja de Palma, la modificación de la línea del tranvía en la zona de Ponent y que el segundo cinturón, que enlazará con el Camí dels Reis, no se plantee como una autovía.
Por otra parte solicitan que se haga un censo y un mapa de las zonas saturadas de locales de restauración, incluidas discotecas y salas de fiesta que, según defienden, «deberían de estar prohibidas en áreas de plurifamiliar » por lo que piden que no se den más licencias de estos usos tanto en esas urbanizaciones como en las que cuentan con muchos equipamientos docentes, por ejemplo Son Rapinya.