El aspecto final de cómo será el eje cívico de Nuredduna se adivina estos días. El pavimento está colocado en algo menos de la mitad de la calle y las grandes jardineras ya se están instalando. Según el área de Infraestructures i Accesibilitat, los trabajos están al 40 por ciento. «A partir de ahora el ritmo de las obras, que comenzaron en agosto, será más rápido», dijo Carlos Planas, director de obra y proyectista del eje cívico de Nuredduna, que advirtió que se ha pedido una prórroga de seis semanas para finalizar la obra, que estará acabada en junio. Las fuertes lluvias de noviembre, la complejidad de la obra y la COVID han retrasado los trabajos.
El tramo más complejo del proyecto ya está acabado. Se trata del cierre del túnel que desviaba el tráfico de Avingudes hacia Nuredduna. Apenas queda rastro de él, solo unas escaleras que comunican con el túnel. «Es la salida de emergencia», señaló Planas. Tras pintar las paredes del túnel, queda ahora cambiar ventilaciones y señales. En el exterior ya se pueden ver los cerramientos que albergarán grandes jardineras. Planas advirtió que «aún se tienen que cubrir de tierra vegetal y tendrán suelo urbano de drenaje sostenible, que ayudarán a filtrar las aguas pluviales». Tras instalar el riego se plantarán árboles y arbustos. Solo tres árboles, de los ocho previstos, se eliminarán por su mal estado.
El aspecto final que tendrá el proyecto del eje cívico.
El eje llegará hasta la plaza de las Columnas y se restaurarán las columnatas y los columpios. También se cerrará al tráfico el tramo de la plaza desde la esquina de la calle Uetam hasta Francesc Barceló i Combis, aunque no se renovará el pavimento hasta que se solucione el cierre definitivo de la gasolinera. En este espacio, además, se instalarán juegos infantiles pintados en el suelo y se comunicará con rampas con el parque infantil.