El Baluard del Príncep sigue envuelto entre grúas y material de construcción, mientras se está renovando en profundidad. Fuentes del área de Modelo de Ciutat señalaron que «las obras avanzan a buen ritmo y se sigue el calendario previsto inicialmente, que marcaba un plazo de ejecución hasta junio de 2022». A día de hoy, «las obras están muy avanzadas y se está llevando a término alguna pequeña modificación del proyecto a petición del Ajuntament, como la incorporación de más arbolado».
Desde el Consistorio advierten que «ya se ha recuperado la parte posterior de las arcadas que estaba escondida y se está rehabilitando la parte que se encontraba en peor estado. También está muy avanzada la escalera y el nuevo acceso que va desde la Porta des Camp al foso». Se trata de la última fase de las obras, en las que ya se revelan los arcos del antiguo puente de la Porta des Camp. Un puente que atravesaba el foso de las murallas que rodeaban la ciudad hasta 1902, cuando fueron derribadas.
El área de Modelo de Ciutat tiene previsto que el proyecto, obra de los arquitectos José Antonio Martínez Lapeña y Elías Torres que comenzó en 2009, esté acabado en verano de 2022. En los últimos 15 años la zona ha vivido una importante reconversión. Las viviendas de los militares fueron derribadas en 2007 y se abrió el hotel Es Príncep, un establecimiento de cinco estrellas.
Según Tomeu Bestard, cronista de Palma, «sa Porta des Camp que se está recuperando era una de las entradas a la ciudad», al igual que ocurría en lo que fue luego Jaime III (en la imagen inferior izquierda). En esa zona se encontraba el recinto amurallado que rodeaba Ciutat y la obra está recuperando la muralla renacentista, «del siglo XVI, que se defendía de la artillería pesada como los cañones. Estas murallas sustituyeron a las medievales, más altas y estrechas, que se sorteaban con arietes, torres y escalas, así como grandes fosos». El sistema defensivo de Palma cambió con las nuevas forma de guerra y las murallas se hacen más robustas y bajas.
«Los muros del Baluard del Príncep son muy anchos para aguantar los cañonazos. Los contrafuertes están inclinados para escupir las balas», dice Bestard. Los baluartes permitían colocar artillería de defensa y además del Príncep estaban el de Berard, Ses Voltes o Sant Pere, aún en pie, mientras que se derribaron los de Sant Antoni, Sitjar o el de Hornabeque.
El apunte
Una obra de gran envergadura que se inició en 2009
El foso de la Porta des Camp y la escalera que conectará con la plaza pertenece a la fase D de las obras, que tiene una superficie de 11.729 metros cuadrados. También se lleva a cabo la fase F, con el edificio de recepción y el centro de interpretación del centro histórico. Estas dos fases tienen un coste de 4,1 millones de euros y cuentan con la financiación del Ministerio de Fomento. Las obras de restauración se iniciaron en 2009 y se han ido ejecutando en seis fases. En 2017 se inauguró la fase E, que rehabilitó el Baluard y también urbanizó las calles Porta del Mar, Bastió del Príncep y Bala Roja.