La Associació de Veïns del Banc de s'Oli-Plaça de la Mercè ha iniciado una campaña de colocación de carteles para exigir silencio y civismo a los usuarios y propietarios de los bares y restaurantes de la zona.
Los vecinos denuncian que «la situación está descontrolada», hasta el punto de que «los peatones se ven obligados a andar por la calzada porque no hay espacio para caminar por las aceras» y critican que los bares abren hasta la una de la madrugada.
Por todo, exigen que se vuelva a la situación de control de horarios y dimensiones de las terrazas de antes de la pandemia.