Elena sale a una calle de su barrio en Palma el pasado 12 de octubre, día festivo. En la esquina de la iglesia se topa con una gran acumulación de basura desparramada en el suelo. Una docena de bolsas, quizás alguna más, repletas de basura además de cajas de cartón vacías. Incluso un zapato. «Si tuviéramos un servicio de limpieza decente y preocupado por su ciudad, cualquier barrendero de Emaya que pasara por delante y viera esto, podría avisar para que se retirara» piensa. No solo eso, lo plasma en un tuit de denuncia. Se trata de una historia real, recurrente a través de otros personajes y otros escenarios.
Aceras sucias, impregnadas de excrementos u orín de perro, y manchas de origen desconocido que huelen mal y atrapan pegajosamente las suelas de los zapatos a su paso no son realidades extrañas en Palma, a pesar de que un buen número de operarios municipales trabajan para mejorar la situación.
Algunas expresiones del incivismo que ciertos habitantes de la capital balear muestran como modo de vida motivan malestar entre sus vecinos. Ante esto no estamos totalmente desprotegidos. ¿Cómo hacemos saber a las autoridades municipales que nuestra necesidad es imperiosa? ¿Es un tuit la mejor forma para incitar a la acción de la administración?
Existen canales establecidos, y de hecho, uno de los principales a lo que a menudo se acude son las redes sociales. Allí los Community manager de turno, en este caso de Emaya, se afanan en redirigir a los palmesanos al medio correcto. Es cierto, no todos los contribuyentes de Palma tendrán garantizada la atención puesto que estamos hablando de medios telemáticos que no todo el mundo maneja ni tienen por qué poder utilizar. No obstante, será de utilidad a un buen número de personas.
En el apartado de Gestions de Qualitat Urbana encontramos una subsección de Atenció a la ciutadania. En la misma se recogen los suggeriments i reclamacions a través de un formulario. Una vez rellenado y enviado un operador de Emaya se pondrá en contacto con la persona denunciante para darle una respuesta sobre su petición.
Si esa vía de comunicación no funciona podemos optar por un canal alternativo, también un espacio destinado a tales efectos en la página web del Ajuntament de Palma. Este ofrece la posibilidad de contactar con Cort para otro tipo de avisos no estrictamente ligados a la limpieza; por ejemplo temas de parques y jardines o estados deficientes en carril bici.
El formulario de quejas y sugerencias incorpora un espacio para dejar por escrito los datos personales del ciudadano con necesidades. Al final hay un campo de 3.000 caracteres para describir el motivo de la queja, lo que permite una explicación bastante pormenorizada de la situación.