Solo un 10,2 por ciento de los niños que actualmente residen en Son Banya asiste al colegio de forma regular. Así lo indican las cifras que maneja el área de Benestar Social del Ajuntament relativas al curso escolar que acaba de terminar. Estas mismas cifras indican que casi siete de cada diez, un 67,35 por ciento, presenta un absentismo crónico. Entre medias, otro 10,2 por ciento asiste de forma esporádica y el 6,12 por ciento lo hace de manera intermitente.
El director general de Benestar Social, Joan Antoni Salas, explica que el absentismo escolar se clasifica de la siguiente manera: se considera esporádico cuando el alumno falta a clase ocasionalmente, hasta 4 días al mes. Es intermitente si falta semanalmente uno o más días, y es crónico si se ausenta de las aulas la mitad o más días de clase al mes.
Actualmente hay 49 niños residentes en el poblado de Son Banya, a los que hay que sumar otros siete niños que han sido realojados durante el curso, que están escolarizados en diferentes centros educativos de Palma.
En el caso de los niños que están realojados en otros lugares de Palma, las cifras son muy diferentes, ya que el 42,86 por ciento asiste regularmente al colegio; un 14,29 por ciento presenta un absentismo esporádico; un 42,86 por ciento presenta un absentismo intermitente y ninguno de ellos, el 0 por ciento, presenta un absentismo crónico.
Ante estas cifras, el director general concluye que lo más destacable es que en el caso de los niños que han dejado el poblado y han sido realojados en otros barrios llevan una vida mucho más normalizada y desaparece el absentismo crónico, aunque es cierto que aún hay un 42 por ciento con absentismo intermitente».
El Consistorio supedita las ayudas sociales que da a las familias que salen de Son Banya a que cumpan una serie de compromisos y entre ellos está la escolarización adecuada de los pequeños». Y es que, afirma Salas, «la proteción de los menores es el principal motivo para desmantelar Son Banya, pues sin una escolarización normalizada estos menores no tienen futuro».
Paralizado de nuevo el desalojo por falta de viviendas disponibles
El desalojo de Son Banya que se acaba de reanudar ya vuelve a estar paralizado, en esta ocasión por la falta de viviendas en las que reubicar a las familias que han de dejar el poblado. El concejal de Benestar Social i Cultura, Antoni Noguera, admite que en estos últimos días han salido dos familias que han sido realojadas en las únicas dos viviendas sociales vacías y disponibles con las que contaba el Ajuntament. Por tanto no puede salir ninguna más hasta que se consigan nuevos pisos, que además no pueden estar en ningún barrio vulnerable, como Son Gotleu, Nou Llevant o Camp Redó, entre otros. El Consistorio ha hecho un llamamiento al Ibavi para que se implique en este proceso mediante la cesión de algunas de sus viviendas sociales. En cuanto a los derribos, Noguera declara que estos solo se realizarán una vez que se haya vaciado una isleta completa, por lo que de momento no se derribarán las viviendas de estas dos familias que ya se han marchado.