Son pequeñas, muy rápidas y de un tono pardo que les permite pasar desapercibidas. Por eso tiene un cierto mérito proponerse encuadrarlas en una fotografía y conseguirlo. Las sargantanes pitiusas corren un grave peligro, incluso algunos estudios vaticinan que pueden acabar por desaparecer en cuestión de años. Sin embargo, se las puede encontrar actualmente en Palma, habitando ciertos reductos.
Este pasado jueves el presidente del GOB, Amadeu Corbera, compartió en su perfil de Twitter la imagen de una sargantana ibicenca correteando junto a la acera de una calle de la capital balear. Por su parte, desde la Societat d'Història Natural de les Balears precisan que «quedan pequeñas poblaciones de la sargantana de las Pitiüses introducida en Palma». Curiosamente una de esas poblaciones incluye la zona del local del GOB, en los alrededores de la calle Reina Maria Cristina.
Algunos otros usuarios contribuyen a seguirles el rastro a estos pequeños y esquivos reptiles, endémicos de las Pitiusas, y dicen haberlos encontrado en el aparcamiento militar de Cala Comtessa, o por ejemplo en Cala Rajada, donde al parecer es fácil toparse con ellos.
La introducción de especies foráneas, especialmente las serpientes invasoras que en los últimos años han incrementado su presencia de forma notable en el conjunto de las Islas, constituye el principal elemento que explica el retroceso de estos animales. Es por este motivo que las autoridades autonómicas y locales ponen en marcha cada temporada una campaña de captura de estos depredadores.
En este sentido, la Societat d'Història Natural lamenta la posibilidad de que «l'última sargantana de les Pitiüses viurà a un escocell -en castellano alcorque- de Palma».
Según informa el Govern la sargantana balear habita 12 islotes que rodean Mallorca y 16 de Menorca, además de 18 islas e islotes del archipiélago de Cabrera. En las Pitiusas, la población se mantiene en 48 islas e islotes, incluyendo las principales, una distribución desigual ligada a la conservación de los espacios naturales.