En una viñeta cabe la transformación de la ciudad a través de los ojos de Toni Roca, el hombre que durante décadas organizó la cabalgata de Reyes Magos de Ciutat. Cristina Llorente, guionista y arquitecta, y Flavia Gargiulo, ilustradora, son las autoras del cómic Tanmateix, la màgia, donde reviven una Palma rescatada de los archivos y hemerotecas.
El cómic narra la vida del abuelo de Llorente, lo que les permite también narrar la ciudad de otros tiempos, la transformación de su tejido comercial y sus edificios o cómo han crecido esos niños que se ilusionaron con las cabalgatas de antaño y hoy son abuelos.
En los próximos días arranca la campaña de crowdfunding de Tantamateix, la màgia en la plataforma Ulule, que supondrá un empujón para terminar la obra, cuya publicación está prevista para finales de año de la mano de la editorial Disset.
«Hemos hecho una investigación a nivel de ciudad», cuenta Llorente, «siguiendo el hilo narrativo de las cabalgatas de Reyes Magos que organizaba mi abuelo. En esta novela gráfica hay varias vertientes: la social y tradicional, pero también la histórica. Hacemos un recorrido hasta el año 2000».
Un ejemplo de esta investigación urbanística es «la oficina de mi abuelo, que estaba en la plaza Patines. La pista actual era un pabellón de vidrio muy interesante a nivel arquitectónico», cuenta Llorente, que escogió a Gargiulo gracias a sus reconocidas ilustraciones urbanas.
Divulgación
Llorente descubrió la historia de su abuelo por casualidad: «Me encontré un recorte del diario Baleares, donde Quino Caldentey entrevistaba a mi abuelo como embajador en Palma de los Reyes Magos de Oriente». Empezó a tirar del hilo y se topó con una historia apasionante. «Con mi tía Pilar empezamos a buscar información. Mi abuelo, funcionario del Frente de Juventudes, se encargó de organizar las cabalgatas desde 1957 hasta 1975 y también de los campamentos de La Victòria. Hemos entrevistado a aquellos niños que ahora son abuelos».
La carroza de La Estrella de Oriente, Sa Pepa o los carruajes de los Reyes Magos fueron obra de este hombre que siempre mostró una especial ilusión y que aún hoy es recordado. Llorente, su nieta, tiene un encuentro de ficción con su abuelo en el año 2000 y le rinde homenaje con esta novela gráfica que cuenta su vida y la de Palma.
Las autoras, que llevan más de un año trabajando, advierten que el cómic «es una herramienta potentísima de divulgación». Gargiulo señala que «tenemos mucha ilusión» y siguen esforzándose para mostrar la historia reciente de la ciudad. Ahora solo necesitan el último empujón de donantes para acabar su obra.