La EMT pondrá en circulación mañana los últimos 23 autobuses nuevos de los 100 comprados, con lo que se culmina en proceso de renovación de la flota, que ha supuesto una inversión de 32,5 millones de euros y permite retirar de forma escalonada los cerca de 80 autobuses que cuentan con más de veinte años.
El alcalde de Palma, José Hila, presentó este lunes por la mañana los últimos buses de gas natural comprimido en un acto celebrado en el aparcamiento del Castell de Bellver, al que asistió la presidenta del Govern, Francina Armengol, junto al presidente y el gerente de la EMT, Francesc Dalmau y Mateo Marcús respectivamente.
El proceso de compra, recordó el alcalde, se inicio en febrero de 2017 cuando se consiguió la financiación del Banco Europeo de Inversiones para llevar a cabo esta compra que ha supuesto 32,5 millones. El Govern ha aportado 12,5 millones, es decir cerca del 40 %, a través de los Fondos Feder de los años 2019 y 2020 (10.775.000 millones) y de la ley de capitalidad de 2017 (1.500.000 millones).
En total se han comprado 60 autobuses de 12 metros, otras 12 unidades de 15 metros y 28 vehículos de 18 metros (articulados), todos ellos «menos contaminantes y más sostenibles». Incluso disponen de tecnología solar mediante una manta fotovoltaica en el techo que alimenta con energía solar los equipos interiores del bus.
Hila destacó el «mérito» que tiene haber renovado la flota y mantenido los puestos de trabajo «en tiempo de pandemia» y afirmó que ahora «el objetivo es recuperar los pasajeros perdidos por la pandemia». La empresa ha perdido el 50 % de los usuarios desde el inicio de la crisis económica.
Por su parte, Armengol puso en valor la apuerta del Govern para que «Mallorca sea una Isla más respetuosa con el medio ambiente y por la lucha contra el cambio climático», así como por el transporte colectivo. Anunció que este mismo año será posible que la tarjeta TIB se pueda utilizar en los autobuses de la EMT.
Los nuevos autobuses irán destinados a reforzar las líneas de los principales corredores de la ciudad, informó el gerente. En cuanto a los buses que se vayan retirando, los que son demasiado viejos solo sirven para aprovechar piezas y otros son donados, como se ha hecho recientemente con el pueblo saharaui.
En cuanto a la protesta convocada para mañana por los sindicatos de la EMT, el primer edil declaró que «hay dos modelos, el que aplicó el gobierno de derechas en la pasada crisis económica, cuando recortó derechos laborales, y el nuestro, en esta crisis, donde existe el compromiso de mantener todos los puestos de trabajo, que en estos tiempos es un compromiso muy importante, que nadie antes hizo ni cumplió».