El borrador del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Palma, elaborado por una empresa externa al Ajuntament, estudia diversas alternativas para el futuro de Son Puigdorfila, una de las entradas de la Serra de Tramuntana, que pasa por su desclasificación parcial y en sus conclusiones establece que la solución más equilibrada a las características de esta finca es la de otorgar el carácter de suelo urbanizable a una superficie de 8,9 hectáreas dentro del terreno.
Son Puigdorfila es un territorio con un elevado valor socioambiental con presencia de elementos patrimoniales merecedores de protección. Dispone de 227.583 metros cuadrados al noroeste de la ciudad de Palma, entre el camino de Son Rapinya, limitando con el suelo urbano de Sa Taulera y la autopista de Ponent. Según el Plan General de 1998, aún vigente, estaba previsto que se desarrollarse como reserva de suelo residencial.
De hecho, como se recordará, existía un proyecto que preveía la construcción de 700 viviendas y una serie de equipamientos (comercial y docente) y afectaba a más de 23,5 hectáreas de terreno de Son Puigdorfila Sud. Finalmente en septiembre del año pasado Cort suspendió su tramitación, en virtud de la aplicación de la disposición derogatoria única del Decreto Ley 9/2020, de 25 de mayo, de medidas urgentes de protección del territorio de las Illes Balears
Pues bien, ahora la alternativa mejor valorada en el borrador del nuevo plan contempla que es susceptible de albergar usos urbanísticos una superficie de 89.784 metros cuadrados localizada al noreste de la parcela. El resto, 137.799 metros cuadrados, quedaría calificado en esta alternativa como suelo rústico.
Esta parte urbanizable es donde existe una vegetación de menor densidad, se explica. Eso sí, se aclara que la atribución de edificabilidad, que no se concreta, «ha de ser proporcional a su capacidad de carga y con una densidad baja o medio baja».
Conservación
Esta clasificación de suelo urbanizable en 8,9 tareas, indica la propuesta, «permitiría asegurar la conservación de las edificaciones e instalaciones históricas merecedoras de protección (la posesión rural y el recinto de la plaza de toros) que podrán ser destinados a equipamientos públicos».
Para el resto del terreno, se añade, la calificación como sistema general en suelo rústico «posibilita que esta pieza forestal, muy próxima al centro urbano de Palma, pueda ser destinada espacio libre de uso público. En cualquier caso sería un parque forestal, con la única adecuación de senderos, de la misma naturaleza que Bellver».
Además se indica que la adquisición pública de este sistema general -mediante el sistema de expropiación- «aseguraría su conservación y uso socioambiental de acuerdo con su naturaleza forestal».
Los vecinos se oponen a cualquier edificación
La Associació Son Quint-Parc Natural de Ponent se opone a cualquier edificación en este terreno. «Es cierto que no se indica qué supone en cantidad de pisos a edificar, pero en la alternativa 1.2, se habla de una carga edificable para 8,9 Ha y se concreta que se trataría de 269 viviendas», explica su presidente, Joan Prats. «No son las 700 que se preveían, pero el destrozo es mismo, y la justificación nos parece ridícula», asevera.