El plazo de vigencia del Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) de Palma está a punto de caducar (se aprobó para el periodo 2014-2020) y el área de Mobilitat de Cort ni siquiera ha iniciado la redacción del nuevo plan. Esto obliga al Ajuntament a aprobar una prórroga del PMUS hasta que esté finalizado el nuevo texto, algo que se dejará en manos de una empresa externa.
La previsión, según informan fuentes municipales, es que la redacción del PMUS se adjudique antes de que finalice el año. El equipo que lo redacte tendrá unos plazos, que se estima que será de entre tres meses y medio año, por lo que no será probablemente hasta mediados del año que viene cuando se pueda aprobar el nuevo plan. Cort calcula un beneficio de 17 millones de euros al año como consecuencia del impacto positivo del PMUS en la calidad de vida, la salud y el ahorro energético.
El PMUS es de obligado cumplimiento pero no por ello el Consistorio lo ha ejecutado al completo. La portavoz de la asociación Vianants en Lluita, Sonia Jichi, declara que «sabemos que muchos de los objetivos del PMUS se quedarán sin cumplir. Basta con ver la gran dependencia que seguimos teniendo con respecto al coche y el alto ratio de vehículos por habitante».
Red de itinerarios
«Lo que echamos en falta –detalla– es un red de itinerarios peatonales accesibles. La ciudad debe ser permeable a la bici, por lo que no se puede peatonalizar barrios enteros. Además, muchos barrios periféricos requieren de actuaciones urgentes por seguridad vial». La entidad entiende que «pese a que los comerciantes sigan pidiendo más aparcamientos, está demostrado que las zonas habilitadas al peatón conllevan más consumo en comercios de proximidad».
El nuevo PMUS supondrá para Vianants «la oportunidad de recuperar el enfoque de la movilidad sostenible bien entendida, que es la que consigue invertir la jerarquía actual y pone al viandante como protagonista en la ciudad». El nuevo PMUS «debe poner el foco en la movilidad peatonal, que es la clave para convertir Palma en una ciudad tranquila, libre de estrés y del caos de circulación actual». Jichi recuerda que «hasta el 50 % de los recorridos diarios se hacen a pie y que, según la DGT, el 30 % de los desplazamientos en coche son de menos de 3 kilómetros».
En opinión de esta entidad «Palma sigue incumpliendo la legislación vigente en materia de accesibilidad y el peatón se está resintiendo cada vez más». Por eso «nos gustaría ver que el futuro PMUS atiende verdaderamente a las necesidades del peatón».
De lo contrario, alerta Jichi, «corremos el riesgo de que el nuevo PMUS esté enfocado a promover la movilidad eléctrica lanzando el falso mensaje de que movilidad eléctrica y sostenible es lo mismo». Advierte de que «el gasto público y privado que provocaría promocionar la movilidad eléctrica es un gran error porque no resuelve los problemas de tráfico, de seguridad y ni siquiera el de la contaminación».
Vianats deja claro que «tal y como se muestra en la pirámide de movilidad sostenible, el peatón debe ser el protagonista junto con la bicicleta con carriles más amplios y fuera de las aceras». Además, «el peatón debe tener acceso a una red de transporte público eficiente», concluye Jichi.